La llamada Cascada Dorada no se ve hoy dorada, el cielo totalmente encapotado produce otros tonos, más verdes, más grises... Pero impresiona igualmente aunque las fotos no queden tan guapas. El río Hvítá se despeña por uno de esos caprichos de la orografía islandesa y cuando la ves desde arriba tienes la impresión de que se hunde en la tierra.
Y estás dispuesta a creer que así es (cualquier cosa en estas tierras parece posible), pero caminas un poco y atisbas entre la nube que sube de la cascada, un estrecho cañón por el que enfilan a todo trapo los 140 m3/seg., que caen en verano, según wikipedia.
Y la miras desde distintos ángulos con la boca abierta...
...y te gustaría seguir mirándola... Pero hay que continuar el circuito del día. Habíamos dejado atrás Haudalakur y sus géyseres por culpa de un diluviazo y optamos por venir hacia Gulfoss a toda marcha para llegar antes que la tromba, así que volvemos ahora a ver si el tiempo se porta. :)
PRÓXIMA: Haukadalur y sus géiseres
Y estás dispuesta a creer que así es (cualquier cosa en estas tierras parece posible), pero caminas un poco y atisbas entre la nube que sube de la cascada, un estrecho cañón por el que enfilan a todo trapo los 140 m3/seg., que caen en verano, según wikipedia.
Y la miras desde distintos ángulos con la boca abierta...
...y te gustaría seguir mirándola... Pero hay que continuar el circuito del día. Habíamos dejado atrás Haudalakur y sus géyseres por culpa de un diluviazo y optamos por venir hacia Gulfoss a toda marcha para llegar antes que la tromba, así que volvemos ahora a ver si el tiempo se porta. :)
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Son preciosas. Islandia es un viaje pendiente .
ResponderEliminarGracias, Charo. Sí que merece la pena ir.
EliminarBesos
Poderosa y magnifica!
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